Dolor de piernas

Otra de esas dolencias muy comunes que padeceremos a lo largo de nuestra vida es sin lugar a dudas del dolor de piernas. La forma más común es que se presente mediante calambres en las piernas, pero en otras ocasiones puede presentarse como un dolor insoportable que nos imposibilitará el caminar.

¿Cuáles son las causas del dolor de piernas? Vamos a verlas en dos grupos; comunes y menos comunes. Las más comunes son:

Calambres musculares: En ocasiones, sentiremos calambres en las piernas que nos producirán un dolor leve o grave. Esto viene provocado por una serie de espasmos musculares, que incita a que nuestros músculos se contraigan.

dolor de piernas bajoLos calambres pueden ser provocados por una deshidratación mientras hacemos ejercicio, hacer ejercicio excesivo, tomar medicamentos como la estatinas, no calentar bien antes de empezar una actividad física o haber recibido muchas veces un golpe en la misma zona.

Distensión muscular: Es provocado cuando hay un desgarro o estiramiento del músculo exagerado. La causa más común es realizar un ejercicio físico que sobrepase nuestra capacidad física o cargar con mucho más peso del que nuestro cuerpo puede soportar.

Fractura por sobrecarga: En este caso, es el hueso de la pierna el que resulta dañado cuando levantamos mucho más peso del que nuestras piernas están acostumbradas a aguantar.

Tendinitis: Nuestros músculos están unidos al hueso a través de los tendones. Sucede a veces, que debido a una actividad física o cargar mucho peso, el tendón se inflame o irrite.

Con la edad, también es muy común sufrir de tendinitis, pues los tendones van perdiendo elasticidad y son más débiles ante cualquier lesión que pueda provocarnos hacer algún deporte o al recibir un golpe.

Ateroesclerosis: A causa de la acumulación de colesterol y grasa en nuestra sangre, en las paredes de nuestras arterias se forman unas placas que van endureciéndose.

Esto vuelve las arterias más rígida y estrechas, impidiendo el correcto paso de la sangre.

Este dolor de piernas es muy común a medida que envejecemos. Se sentirán las piernas doloridas al caminar o hacer cualquier ejercicio, y el único alivio lo sentiremos cuando estemos sentados.

Trombosis venosa profunda: Una causa muy común que provoca dolor en las piernas a gente de avanzada edad. Sin embargo, siendo casos muy raros, puede darse también en gente joven.

Este tipo de dolor es provocado cuando un coágulo, una masa de sangre que se ha solidificado, pasa a través de nuestro sistema sanguíneo. Las causas que lo provocan son el cambio del flujo de la sangre provocado por: una operación reciente, obesidad, haber dado a luz recientemente, una fractura en las piernas, llevar una vida sedentaria o producir más glóbulos rojos de los necesarios.

Osteomielitis: Se trata de una infección provocada por una bacteria u hongo que afecta directamente a nuestros huesos.

Es algo que puede afectar a grandes y pequeños, pero, en el caso de los primero afectará a los huesos más pequeños, mientras que para los niños atacará los huesos más largos. No tiene por qué empezar la infección en las piernas. Puede empezar en un brazo y de ahí ir descendiendo a través de nuestra sangre hasta la planta de los pies, provocando dolor por donde pase.

Celulitis: Aunque no las notemos, en nuestro cuerpo siempre hay algún tipo de bacteria, pero nuestro sistema inmunológico nos protege de ellas. Sucede a veces, que una parte del tejido que recubre nuestra piel se rompe, y eso deja paso libre a las bacterias que nos provocarán la infección.

La más común es la infección por estafilococo, que provocará que nuestra piel de la zona afectada se vuelva rojiza, se irritará, aumentará la temperatura en esa zona y sentiremos un dolor muy fuerte.

Gota: Como ya explicamos cuando hablamos del dolor de rodilla, la gota es provocada por una producción excesiva de ácido úrico en nuestro cuerpo. Al no poder eliminarla del todo a través de la sangre, nos provoca dolores en alguna articulación como es la rodilla. Como afecta a una parte importante de nuestra pierna, esto nos provocará fuertes dolores en una, a veces en las dos, de la pierna si el dolor es muy agudo.

Daño del nervio: Los nervios son como una red de comunicaciones dentro de nuestro cuerpo que le dicen al cerebro que hacer. Al resultar dañados, la información no puede llegar apropiadamente al cerebro, y ello nos puede provocar dolores o una completa incapacidad para mover las piernas.

Varices: En el interior de nuestras venas hay como una especie de válvulas que se ocupan de que la sangre llegue correctamente a nuestro corazón. Pero, en ocasiones esas válvulas no funcionan bien, y esas venas se hinchan o retuercen, siendo entonces cuando aparecen las varices en las piernas. Además, nos serán totalmente en nuestra piel.

Generalmente es algo que ocurre en las piernas, pero puede pasar en otras partes del cuerpo. Y, como dato añadido, es más común en mujeres que hombres. Pueden aparecen por un problema de nacimiento o durante el embarazo, cosa muy común, por el cambio tan repentino que sufre el cuerpo de la mujer durante la gestación. En otras ocasiones, el estar mucho tiempo de pie puede favorecer que aparezcan, pues ello implica que nuestro sistema sanguíneo mueve más sangre de la normal y las venas pueden fallar ante una producción tan anormal y rápida de la sangre.

Estas serían las causas de dolor de pierna más comunes. Pasemos a ver las menos comunes.

Tumores: Los tumores óseos no son muy comunes, pero si aparecen pueden provocarnos fuertes dolores de piernas.

Enfermedad de Legg-Calve-Perthes: Una enfermedad que se sabe poco, y que suele ocurrir en niños de 4 a 10 años.

Nuestro fémur se conecta a la cadera mediante un hueso que se llama “cabeza femoral”. Si ese hueso no recibe la suficiente cantidad de sangre, muere, y esto nos puede provocar rigidez de la pierna, dolor de rodilla, que las piernas tengan un tamaño diferente la una de la otra, calambres en las piernas…

 Esquema localización femur

En algunos casos, sucede también que la cabeza femoral se mueve durante el periodo de crecimiento. Es muy común en niños, sobre todo varones, que sufren obesidad o un crecimiento acelerando del cuerpo.

Ciática: La ciática sucede cuando nuestro nervio ciático, que va desde la zona lumbar y pasa por nuestra pierna, resulta dañado o se hincha. Lo más normal es que nos duela la parte baja de la espalda, pero no es raro tampoco que sintamos dolor en las piernas.

¿Qué es lo que podemos hacer para prevenir el dolor de piernas?

Estar en movimiento: Si somos una persona cuya vida laboral consiste en estar mucho tiempo sentados, es muy recomendable levantarse de vez en cuando para estirar las piernas unos minutos. Estar mucho tiempo sentado puede afectar a la correcta circulación de la sangre, y eso nos provocará dolores.

Descansar: Por el contrario del anterior caso, si somos persona que tenemos que estar mucho tiempo en movimiento o practicamos algún deporte, tomarse descansos de vez en cuando es bueno. Cuanto más nos movemos, más rápido circula nuestra sangre, y una cantidad excesiva no es buena para el cuerpo.

Levantar peso adecuadamente: Si tenemos que levantar algo muy pesado, es muy importante saber cómo hacerlo correctamente, ya que no solo podríamos sufrir dolor en las piernas, sino también en la zona lumbar de la espalda. Además, de que podríamos dañarnos seriamente alguna parte de nuestro cuerpo.

En el caso de que el dolor que sintamos en la pierna sea leve, podemos aplicar alguno de estos remedios naturales:

Aplicar hielo: Envolver unos cubitos de hielo en un pañuelo, o con una bolsa de alimentos congelados, y aplicar en la zona dolorida durante 15 minutos para que los músculos se relajen. Hacer esto cuatro veces al día.

Poner las piernas en alto: Si lo que tenemos es un dolor provocado por problemas de circulación, lo mejor es poner las piernas en alto para que la sangre vuelva a fluir correctamente.

Agua tibia con sal: Si tras una jornada laboral larga, o haber hecho alguna actividad física pesada, nos duelen las piernas, mojarlas con agua tibia con sal es un buen remedio natural para aliviar el dolor.

masaje para el dolor de piernasMasajes: Masajear la zona dolorida para que se relajen los músculos es el remedio más usado por todo el mundo que a menudo sufre de estos dolores.

Infusión de Ginkgo Biloba: Muy demostrado está que una infusión de esta planta medicinal ayuda a combatir los dolores provocado por una mala circulación de la sangre.

Aceite de coco: Hay que aplicarlo mientras este tibio en la parte dolorida de la pierna mientras se masajea para que surta el efecto deseado.

Nueces: Un remedio casero que nos llega desde China. Si somos personas propensas a tener dolor de piernas provocado por una mala circulación de la sangre, cada mañana hay que comer tres nueces en ayunas.

Si el dolor no es muy fuerte, o simplemente una molestia, podemos acudir a un fisioterapeuta para que nos realice un masaje. Si lo que sentimos es que somos incapaces de apoyar el pie, y además tenemos otros síntomas como fiebre y dolor en otra parte del cuerpo, hay que acudir rápidamente al médico.

Dolor provocado por las varices

Ligeras sensaciones de calor, comezón y calambres aislados, son algunos de los síntomas que pueden provocarnos las antiestéticas varices. ¿Sabes cómo prevenirlas? Aquí te mostramos algunas claves importantes ofrecidas por el doctor Eduardo Doneiger, director de la clínica Varicenter en Valencia.

Cómo evitar el dolor de las piernas causado por las varices

A diario, y tras una intensa jornada laboral, se recomienda tomar diez minutos para sentarnos y elevar las piernas, con el fin de relajar las venas y aliviar la presión en nuestras extremidades. Similarmente, a la hora de acostarnos, las piernas deben quedar más elevadas con respecto al resto del cuerpo, algo que podemos complementar con compresas de agua caliente y fría luego, justo antes de irnos a la cama.

Durante el día, e independientemente de si permaneces de pie o sentado la mayor parte del tiempo, será necesario que adoptes la costumbre de efectuar pequeñas caminatas cada media hora, evitar cruzar las piernas y llevar ropa holgada. Las medias de compresión son ideales para mantener a raya nuestras varices, al igual que el empleo del aloe vera, un remedio natural con el que podemos masajear la zona afectada y refrescarla.

En otro aspecto, la alimentación puede jugar a tu favor para eliminar el dolor de las varices si reduces el consumo de sal, moderas la presencia de embutidos y comidas rápidas en tu dieta, y en cambio optas por otros alimentos más saludables como la fibra (ideales para evitar el estreñimiento), las frutas, verduras y los cereales. En este sentido, el Ginkgo Biloba es uno de los remedios naturales más utilizados por sus bondades antinflamatorias y antioxidantes.

Si este artículo te ha servido de ayuda, no olvides visitar otros de nuestros artículos para informarte más sobre las distintas dolencias.