Dolor de cabeza | Dolordered.com

El dolor de cabeza es uno de esos malestares que todos sufrimos en algún momento de nuestra vida. En mayor o menor medida, puede ser un suplicio para muchos. Pero no a todos nos afecta por igual, hay quien sufre dolores de cabeza frecuente y fuertes, mientras que otros los sufren de manera aislada y de intensidad muy leve.

Tipos de dolor de cabeza

Estos son los dolores de cabeza más comunes que podemos padecer y sus síntomas, así como sus causas:

– Migrañas: Las migrañas son uno de esos dolores que provienen desde nuestro cuerpo. Aunque no se ha logrado identificar del todo a que son debidos; se sabe que las migrañas aparecen cuando hay una mala actividad en nuestro cerebro, lo que provoca que haya cambios en nuestros vasos sanguíneos. La persona que las padece suele sentirse mucho más sensible al entorno que le rodea: la luz le molestará, así como los olores, se notará cansado pudiendo llegar a subirle la fiebre y molestarle cualquier ruido que escuche.

Sin embargo, no todo el mundo parece migrañas. ¿Por qué razón? Varios estudios han llegado a la conclusión de que las migrañas es un malestar hereditario. Si algún familiar lo tuvo, es altamente posible que acabes sufriendo de este dolor que puede llegar a ser un muy intenso. Aunque esto dependerá de los casos, si ambos progenitores sufren de ellas, su hijo tendrá, con casi el 100% de seguridad, migrañas. En cambio, si solo uno lo padece, este porcentaje quedaría reducido al 50%. Por lo que podemos decir que las migrañas es algo que llevamos en los genes y se pasa de padres a hijos.

Aunque existen varios tipos de migrañas, centrémonos en los más comunes:

Migraña clásica: Más conocida como migraña con aura, debido a que los síntomas de la migraña van precedidos por una distorsión parcial de la visión, como si algo nos cegara.
Migraña común: Al contrario que en la anterior, los afectados presienten que van a sufrir un ataque antes de sufrir los síntomas. Es conocida como la migraña sin aura, y es la más común en la mayoría de los afectados.

Quien sufra de migrañas no siente un dolor leve, pues comienza siendo un dolor de cabeza moderado que va aumentando según pasa el tiempo. Por lo que es recomendable que el afectado esté en una habitación a oscuras y tranquila. Más adelante, analizaremos remedios que podemos utilizar contra este mal.

Eso sí, no creáis que este dolor únicamente afectará a los adultos. Los niños con padres propensos a ellas también tienen altas probabilidades de sufrirlos en su infancia. Sin embargo, los síntomas no serán como los de los adultos, puesto que el niño puede no padecer fotofobia ni cansancio, por lo que los padres tendrán que observar la conducta de su hijo para saber si padece de ellas o no.

Migrañas abdominales: Mientras que la migraña común afecta a nuestra cabeza, estas afectarán a nuestra zona abdominal. El dolor puede aparecer en modo de episodios que llegarían a extenderse desde una simple hora hasta llegar a las 72 horas.

Los principales síntomas para identificarlo son principalmente la pérdida de apetito, acompañado de náuseas o vómitos, así como la palidez de la piel. También el dolor puede derivarse de nuestra zona abdominal a la cabeza, por lo que hay que tener en cuenta que síntomas tenemos para no confundirlas con las migrañas comunes.

Al igual que las anteriores, suele ser algo hereditario por parte de nuestra familia.

Dolor de cabeza tensional: Es uno de los más comunes y frecuentes dolores de cabeza. Viene asociado por una contracción muscular de alguna de las partes de nuestro cuerpo, generalmente el cuello. Aunque también se le asocia como causante el estar sometido a una situación estresante.

Estos dolores pueden aparecer de forma casual, pero también es muy frecuente que se trate de un dolor de cabeza que aparezca de forma seguida y diaria cuando, sobre todo, los músculos de nuestro cuello y cara se ven sometidos a mucha presión.

Aunque las causas que se asocian a este dolor suele ser la contracción muscular, existen otros factores, tales como estar sometido a una situación de estrés constante, una mala postura, la depresión o estar en un estado de mucha ansiedad. Esto podría desencadenar una serie de factores de riesgo en la persona que lo padezca, que podría acabar en una enfermedad, tales como: sueño interrumpido o nulo, apretar los dientes, depresión o el uso interrumpido de medicamentos.

Para diagnosticar si sufrimos o no de este tipo de dolor, generalmente los síntomas más comunes son un dolor creciente en la frente y parte trasera de la cabeza, sentir mucha presión como si alguien nos la pisara, la sensación de que nuestro cuello está rígido o y dolores intensos que pueden ir aumentando o disminuyendo en mayor o menor medida según va pasando el tiempo. Es recomendable acudir al médico si se siente alguno de estos síntomas.

Una variante de este tipo de dolor es el dolor de cabeza por tensión por episodios. Generalmente más padecido por niños y gente mayor, se le asocia porque en nuestra vida hemos tenido episodios de mucho estrés o que han provocado a nuestros músculos mucha tensión, tales como haber dormido por mucho tiempo o haber realizado demasiado ejercicio, lo que provocaría la fatiga.

Síndrome del dolor de cabeza mixto: Su nombre es debido a que es una combinación de las migrañas y el dolor de cabeza por tensión.

Quienes los padecen suelen ser un derivado a que han presentado un historial en el que han sufrido de migrañas constantes a lo largo de su infancia, o adolescencia. Ello se suma a la tensión que sufren nuestros músculos provocando este síndrome. El dolor para quien lo sufra será diario, pero no siempre en un gran alto, sino más bien moderado que podrá aumentar o no con el paso de las horas.

Para quien sufre de este tipo de síndrome, los analgésicos es una gran ayuda, pues son personas que asimilan muy bien los analgésicos. Eso sí, no debe uno acostumbrarse a ellos si el dolor que se siente es leve, y se ha de estar seguro de sufrir esta dolencia, ya que sus síntomas son una mezcla entre los de las migrañas y el dolor de cabeza por tensión, así que es recomendable estar muy seguro de que no se esté sufriendo solo uno de los dos.

Dolor de cabeza en racimos: De todos los dolores de cabeza de cabeza que podemos sufrir, es el más grave, puesto que nos genera una sensación de como si algo estuviera punzando nuestra cabeza.

Este dolor aparece súbitamente, no afectando tan solo a nuestra cabeza, sino que puede atacar a una parte de la cara, la parte trasera de nuestra cabeza o a uno de nuestros ojos. El dolor suele ser constante, y el más fuerte puede durar entre tan solo 30 minutas hasta las 2 horas. Además, es un dolor que puede darse de manera periódica, siempre a la misma hora del día con la misma duración.

Puede aparecer mientras uno este dormido o despierto, y sus principales síntomas es que en la zona afectada el ojo de dicha zona está más rojo y lacrimoso, la parte de la nariz que corresponda a ese lado también le dolerá, congestión nasal o cara enrojecida.

De todos los dolores que podemos padecer, es considerado como uno de los peores.

Dolor de cabeza en el lado izquierdo: Sentir dolor únicamente en el lado izquierdo de la cabeza puede ser el resultado de una mala migraña, pues estas empiezan en una cierta parte y luego se expande. Sin embargo, puede deberse a otro tipo de razones más serias:
Tumor cerebral: una de las peores causas que podemos encontrar. Nuestro cráneo está preparado para contener exclusivamente nuestro cerebro. Por ello, al aparecer el tumor, generando como un bulto, provocará el dolor en el lado izquierdo de la sien. Funcionando como un muelle, hará que nuestro cerebro se mueva dentro de nuestro cráneo, provocando dicho dolor en ese lado
Derrame: Con este factor hay que tener muchísimo cuidado porque mucha gente que lo ha padecido lo ha descrito que el dolor es similar al que se sufre con las migrañas. Lo que realmente ocurre es que se corta el suministro de sangre al cerebro, por lo que parte de las células de éste mueren, provocando el dolor, muchas veces en el lado izquierdo.

Por ello, es importante acudir al médico si se siente dolor en esa zona, especialmente si viene acompañado de dolor en el costado izquierdo del cuerpo.

Dolor de cabeza en el lado derecho: Al igual que ocurre con el dolor de cabeza en el lado izquierdo suele ir asociado a las migrañas cuando empiezan a aparecer en el lado derecho y de ahí se extienden por alrededor de la cabeza, lo que a veces lleva a un diagnóstico y tratamiento equivocado.

Una de las principales causas del dolor de cabeza en el lado derecho, es el consumo de alcohol o el tabaco. Los últimos estudios de varios investigadores demuestran que el consumo de tabaco puede provocar fuertes dolores en el lado derecho de la cabeza, siendo una dolencia habitual en los fumadores. Otra de las principales causas puede ser el embarazo, sobre todo al principio de este debido a las náuseas o vómitos.

Dolores de cabeza derivados de nuestro entorno o actividad

– Dolor de cabeza de retirada: Del mismo modo a que los fumadores les entran fuertes golpes de tos al dejar de fumar o serles retirado el tabaco, las personas acostumbradas o adictas a la cafeína sufren del llamado dolor de cabeza de cafeína. Cabe resaltar que este dolor no sólo puede aparecer derivado por ser un adicto a tomar café, sino que también tenemos mucha gente que toma medicamentos que contienen cafeína de forma continuada. Ello hace que una vez retirado el medicamento, el cuerpo que ha estado acostumbrado a ella la eche en falta y de ahí provoca esta molestia.

Dolor de cabeza por esfuerzo: Son bastantes frecuentes, y aparece cuando nuestro cuerpo, o cerebro, se ha visto sometido a una labor que ha requerido un gran esfuerzo mental por nuestra parte, tal como puede ser una lectura continuada o haber trabajado varias horas sin parar. Está muy relacionado con la fatiga mental provocada por haber estado usando la vista por mucho tiempo. Es recomendable tomarse unos descansos para prevenir que esto no suceda. Esto también puede causar dolor de ojos.
Dolor de cabeza sinusal: Es un tipo de dolor que afecta sobre todo a nuestros pómulos. Muchas veces, se lo confunde con un resfriado. La forma más sencilla de identificarlo es primero aislar la zona donde apareció el dolor por primera vez, que como ya hemos indicado, será la zona de los pómulos. Luego, este dolor suele afectar también a la zona de los dientes y los ojos, así como una ligera sensibilización de la zona de la nariz.

Otro dato que nos puede ayudar es el color de nuestra mucosidad: si es amarillo, o de color verdoso, indica que sufres este tipo de infección. Del mismo modo que si el aliento se ve afectado a un olor desagradable, puede indicar una inflamación en la zona de la garganta, lo que evidenciaría que sufres de dolor de cabeza sinusal.

Dolor de cabeza durante el embarazo o por cambios hormonales: Común es entre las embarazadas de sufrir dolores de cabeza durante los tres primeros meses de la gestación. Generalmente se le asocia al cambio hormonal que sufre el cuerpo de la mujer durante el proceso, y suele desaparecer en el segundo trimestre del embarazo.

Otros factores que pueden influir que una embarazada sufra este tipo de dolor de cabeza son la eliminación de la cafeína durante el proceso, la falta de sueño, los vómitos, estrés, depresión, el hambre continuado, así como la aparición de migrañas en el caso, ya indicado antes, de que las hayas tenido a lo largo de tu vida.

Otro común es que el dolor aparezca previamente antes de que una mujer tenga su periodo por los cambios de hormonas que siente su cuerpo. Así como el utilizar pastillas anticonceptivas o la menopausia. En las primerizas en su periodo también puede generarse un fuerte dolor de cabeza intenso los días antes de bajarle por primera vez, pero no es un dolor de cabeza frecuente.

Dolor de cabeza provocado por la alergia: Es un tema muy discutido por los especialistas, pues aún no se ha encontrado una “conexión” entre el dolor de cabeza y las alergias.

Sin embargo, muchos pacientes han asegurado que sus dolencias comenzaron al estar en contacto con sustancias u objetos a los que son alérgicos; tales como el polen, polvo… lo que les provocaba los fuertes dolores parecidos a las migrañas. Y no sólo eso, mucha gente asegura que el dolor le deriva al entrar en contacto con ciertos olores.

Dolor de por traumatismo: Cuando sufrimos un fuerte golpe en la cabeza, por una caída, golpe… es muy probable que posteriormente sintamos un fuerte dolor en la zona afectada. Lo más normal es que el dolor vaya desapareciendo poco a poco, pero puede presentar complicaciones para la persona que lo ha sufrido, tales como una mayor dificultad a su capacidad para aprender, o comunicativa, a la hora de dormir y también podría afectar severamente a su estado de ánimo.
Dolor de cabeza por la unión teperomandibular: Muchas veces, cuando tenemos dolor de muelas o una inflamación en los dientes, sentimos como también nos duele la cabeza.

Ello se debe a que la mandíbula se encuentra unida al cráneo, por lo que al experimentar un dolor en dicha zona, este se traslada de nuestra mandíbula al oído. Y de ahí, al resto de nuestra cabeza o a una pequeña zona. Este dolor puede ser leve, pero también muy grave.

Suele ser bastante común en la gente con problemas de dientes, y con anti-inflamatorios se puede aliviar de forma rápida y sencilla.

Causas más comunes del dolor de cabeza

Infección, resfriado o fiebre: Cuando solemos pescar un resfriado, la gripe o nos sube la fiebre, así como cuando nos vemos infectados por algún tipo de virus, es muy probable que nos empiece a doler la zona de la cara o toda la cabeza. Es uno de los síntomas más comunes sobre todo en la gripe.
Sinusitis: Cuando los senos paranasales se inflaman, unas cavidades que se encuentran dentro de nuestra cavidad nasal, se inflaman, ello puede provocar fuertes dolores de cabeza. Sobre todo en la parte frontal, la cual esta comunicada con esas cavidades.
Otitis: El dolor viene provocado por la inflamación del tímpano. Desde allí, el dolor se extiende a ese lado de la cabeza o por toda, dependiendo de la intensidad. Se notará como un pitido en el oído aparte de incesantes pinchazos en la zona del cráneo afectada.
Faringitis: Otro de los síntomas más comunes que causan el dolor de cabeza suele ser la inflamación de la garganta. Es otro de los síntomas comunes de la gripe.
Tensión muscular: Una tensión continuada sobre los músculos de nuestros hombros y cuello, provocará que nos aparezca un fuerte dolor de cabeza conocido como dolor de cabeza por tensión. Por lo que es muy importante no cargar esa zona ni con mucho peso ni someterla a mucha presión a la hora de hacer ejercicio físico o movimientos bruscos.
Cambios hormonales: Cuando las mujeres están a punto de entrar en ese periodo del mes en que tiene su periodo, se han quedado embarazadas, sufren la menopausia o utilizan pastillas anticonceptivas no es nada raro que sufran de dichos dolores por el cambio hormonal que sufre su cuerpo en el proceso.
– Fatiga: La fatiga visual suele ser uno de las principales causas que suframos dolores de cabeza. Si bien depende de cada persona, no todos tenemos la misma resistencia visual, por lo que es muy recomendable dejar descansar los ojos de vez en cuando.

Ya mencionado en la tensión muscular, el cargar mucho los hombros o someterlos a mucha presión, así como el cuello, provocará también fatiga, lo que hará que sea muy probable que suframos de fuertes dolores de cabeza.

Consumir abusivamente medicamentos: Consumir habitualmente medicamentos que añadan ciertas sustancias a nuestro cuerpo, puede provocar que al ser retirado este suframos de fuerte dolores de cabeza. Como también, el hecho de consumir ciertos medicamentos sin control puede provocarnos dicho dolor.
Alcohol: Uno de los mejores amigos de muchos, suele ser una de las principales razones de sufrir dolores de cabeza, sobre todo al haber consumido grandes cantidades el día anterior.
Razones ambientales: El ambiente que nos rodea también puede repercutir en que nos duela la cabeza. Como hemos señalado anteriormente, hay gente que asocia sus dolores como ciertos olores o alergias. Pero, también afecta otros factores, como la contaminación, el ruido incesante o el tabaco puede provocar en la gente fuertes dolores.
Traumatismos: El haber sufrido un golpe en la zona de la cabeza también puede derivar posteriormente en fuertes dolores.
Tumores: Cuando aparece un tumor en nuestro cerebro, este funciona como un muelle que nos empuja. De ahí deriva un fuerte dolor, que nos puede indicar un síntoma de algo que hay que tratar rápidamente.
Seudotumor: En nuestro cerebro aparece algo parecido a un tumor, pero que en verdad no lo es. Nos provocará dolores de cabeza, pero suele ser reversible.
Hipertensión: A veces, cuando sufrimos dolores puede deberse a la hipertensión, y estos pueden ser muy fuertes y continuados.
Artritis temporal: Esta causa se da cuando una de nuestras arterias se hincha e inflama, irrigando la sangre que pasa por la zona de nuestro cuello y cabeza.

Remedios caseros para el dolor de cabeza que podemos emplear para combatirlo

Por supuesto acudir al médico sería uno de ellos, pero vamos a ver que remedios caseros podemos emplear que nos ayudarán a aliviar dicho dolor de una forma más sana sin recurrir a los medicamentos.

Té de manzanilla: El más común y conocido es el té de manzanilla. Echando una pequeña cantidad de manzanilla en ½ de agua hirviendo, solo tendremos que esperar diez minutos antes de consumirlo. Muy recomendable echarle un poquito de limón para el sabor.
Bolsa con hielo: El frío es un fuerte aliado contra los dolores de cabeza. Poniendo unos pequeños bloques en un pañuelo, usando una bolsa de alimento congelado o una bolsa de hielo, la ponemos sobre la zona dolorida y nos recostamos, hasta que se nos pase el dolor.
Té de hierba de limón: Simplemente se prepara mediante infusión, sirve para relajarse y aliviará el dolor.
Masajes: Masajeando ciertos puntos de nuestra cabeza mientras sufrimos el dolor: la parte superior sobre los ojos, la sien y la base de la nariz, disminuirá el dolor.
Alcachofas: Si eres persona de sufrir constantemente dolores de cabeza, es recomendable añadir a tus comidas alcachofas. La alcachofa es un alimento muy bueno para el hígado, y algunas veces la causa del dolor de cabeza proviene de allí.
Esencia de lavanda: Masajear la parte trasera de las orejas, la base del cráneo y las sienes con aceite de lavanda ayudará a aliviar el dolor. Es recomendable lo haga otra persona para que no te entre en los ojos.
Miel de abeja y vinagre de manzana: Tras haber calentado agua, primero disuelve un par de cucharaditas de miel de abeja. Después, añade un poco de vinagre de manzana.
Vaporizador con esencia a menta: En un vaporizador añade unas gotitas de menta y luego unas poquitas de lavanda e inhala. Eso debería ayudar a aliviar el dolor.
Hidroterapia: Primero, sumerge un paño en agua caliente y sitúalo en la zona del cuello. Seguidamente, haz lo mismo pero con un paño que hayas sumergido en agua fría. Al repetir el proceso durante 15 minutos el dolor debería haber desaparecido.
Cafeína: Tomar un vaso de café fuerte puede ayudar a reducir la inflamación en los vasos sanguíneos, lo que ayudaría a hacer desaparecer el dolor.
Aceite de oliva: Se dice que el aceite de oliva contiene un antioxidante llamado oleocantal, que sirve para combatir los dolores de cabeza. Todas dos cucharadas puede ayudar a eliminar el dolor.
Pinza de ropa: Cuelga una pinza de tender la ropa en el lóbulo de la oreja del lado correspondiente donde sientes el dolor.
– Hojas de pino: Hierve un litro de agua y viértelo sobre un recipiente. Añade unas hojas de pino para que se aromatice la habitación.
Ramas de lavanda: Otro remedio usando la lavanda en esparcir por el interior de la almohada unas ramitas.
– Alcohol de rosas: Cubre un frasco lleno de pétalos de rosas con alcohol de 96ºC. Déjalo reposas al sol hasta que haya cogido la esencia y entonces masajea los pies y el cuello con el líquido resultante.
Canela: Verter una cucharada de canela sobre un vaso de agua caliente y remover hasta que se quede un líquido consistente. Entonces masajear la zona dolorida.
Tila: Si el dolor es derivado por el estado emocional, o por una situación de estrés, toma una infusión de tila relajará sus nervios y reducirá el dolor.
Vinagre de sidra: Un remedio muy común en las zonas rurales de Estados Unidos, es aplicarse un paño húmedo bañado en vinagre de sidra cuando empiezan a sentirse los dolores.
Respiración: Llenar el abdomen de aire y luego irlo soltando lentamente. Repetir el proceso durante cinco minutos. También existen técnicas de yoga de respiración por un sólo orificio que están destinadas a disminuir el dolor.
Dormir: El remedio más sencillo de todos. Acostarnos en un cuarto oscuro, donde no se oiga ningún ruido, durante varias horas debería ayudarnos a aliviar el dolor de cabeza, sino también a hacerlo desaparecer.
Masajear las sienes: En el caso de que el dolor se encuentre solo en las sienes, masajear una de ellas con el dedo pulgar y la otra con el dedo índice, mientras se presiona.

Ahora, en el caso de que el dolor de cabeza venga provocado por las migrañas, veamos unos remedios naturales que también pueden ayudarnos a combatirlas.

Jengibre: Uno de los remedios más naturales utilizados para combatir las migrañas. Una vez empecemos a notar el aura, es decir, que se distorsiona la vista, verter una curadita de jengibre en polvo en agua y revolver. Entonces, tomar el tercio de una cucharadita.
Vinagre de manzana: Tomar dos cucharadas de vinagre de manzana ayuda a combatir las migrañas. Para que no se note el sabor tan fuerte, es recomendable mezclarlo antes con agua.
Aromaterapia: Echar unas gotas de aceite de lavanda en un cazo de agua fría. Mojar entonces un paño y ponerlo sobre la cabeza o en el cuello, para que la esencia del olor calme del dolor.
Cáscara de sandía: Colocar una cáscara de sandía en cada sien hasta que se pase el dolor.
Hierba Santa María: Aunque se puede tomar como un té, es mejor consumirla fresca con la ensalada. Ayuda a que se dilaten los vasos sanguíneos y de este modo la sangre se mueva mejor por nuestras venas.
Hielo en los pies: Usa una bolsa de hielo, situándola en los pies, mientras estas tumbado en la cama. Tápate bien y permanece así durante 20 minutos.
Bolsa de papel: Colocar sobre la nariz y la boca una bolsa de papel. Respirar y aspirar varias veces.
Almendras y fresas: Un remedio natural popular es que al comerse quince almendras, o fresas, el dolor desaparece.
Jugo de limón: Bañar los pies y manos en un recipiente en el que se haya añadido jugo de limón.
Cebolla: Partir una cebolla por la mitad. Poner una gasa sobre la zona dolorida y encima de esta la cebolla. Permanecer así durante 30 minutos.
Verbena: Calentar agua y verter una cucharada de verbena. Dejarla reposar para que se enfríe. Entonces, beberla.
Paño de agua fría: Mojar un paño en agua fría y situarlo sobre la nuca. Dejarlo ahí hasta que este seco y repetir el proceso hasta que desaparezca el dolor.
Aceite de hierbabuena: Realizar fricciones en la zona afectada con un poquito de este aceite.

A continuación, una serie de recomendaciones para evitar que aparezcan estos ataques

Lo primero de todo, y más importante, es intentar limitar el consumo de alcohol, fuerte aliado de las migrañas. Así mismo, es importante evitar fumar en la medida de lo posible como los lugares que estén cargados de ruido. Los lugares contaminados también son muy favorables para la aparición de migrañas.

A la hora de comer, es muy importante tomar alimentos ricos en magnesio, como frutos secos, puesto que el magnesio tiene efectos sedantes. También es muy importante tomar alimentos con Vitamina B2, ya que ayuda a nuestras células a producir energía que aminora el dolor de cabeza. La mantecona puede ser otro fuerte aliado de aquellos que sufren migrañas, pues ayuda a prevenir los ataques. Sin embargo, no sirve con los que tienen migrañas agudas.

El consumir muchas carnes cargadas de grasa, sobre carne roja, tampoco es muy bueno para los que padecen migrañas. Ni lo es tampoco el consumir alimentos enlatados y deshidratados, ya que se encuentran cargados de aditivos así como nitrato de sodio.

Si ninguno de los remedios expuestos funcionase, y su dolor perdurase de forma insistente y continuada, es recomendable acudir al médico para que le realizará las pruebas pertinentes. De este modo, encontraría la causa de su dolencia, ya que, muchas veces los síntomas pueden ser confundidos y el remedio que se tome puede empeorar la dolor.

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